Esa caricia que sentí por primera vez en mi historia como humano fue algo que nunca había sentido. O por lo menos que no fuese amor real al que todos estamos expuestos y siempre queremos.
Mi primer
amor llego como un meteoro sin yo desearlo,
Cayó e
impactó todos mis sentidos, fue como nacer de nuevo… se sintió muy extraño.
Me hizo sentir
vivo, real y me hizo capaz de soñar de verdad.
Mi primer
amor fue eso, solo amor. Y aunque no sabía por cuánto tiempo duraría
lo cuide como
si fuese un propio jardín, una rosa, o unas mariposas.
Lo eterno no
dura para siempre, y el por siempre aunque sea una palabra muy fuerte
también muere.
Pero, mi primer amor llego como rocíos por las mañanas, como café
recién colado
y como cantos de pájaros amando la mañana. Se metió entre mis sabanas, me
ilumino más que los rayos del sol, me escucho más que a la Luna, se fugó como
las estrellas, y me balanceo como si estuviese montado en un columpio.
Mi primer
amor me hizo sentir como si estuviese en Cielo, y no sé si eso era perfecto
porque no sé qué tan hermoso puede ser dormir en el cielo.
Mi primer
amor abrió mis ojos,
abrió las
puertas y conocí al mundo.
Afronté mis
miedos, sonreí de verdad y respire con tanta fuerza que mis pulmones no parecían
fallar. Comencé a creer que el corazón solo tiene esa forma que siempre dibujamos,
que tiene ojos y una boca, que tiene su propia mente y esparce todo ese tipo de
emociones por nuestro cuerpo al verle. Fue eso, puro amor. Sin saber cuánto me duraría,
cuanto esperaría; sin creer que un día de verdad llegaría.
Mi primer
amor se basó en promesas e historias,
cartas y
sueños. En miradas profundas y ganas de besar,
de abrazar y
de solo cuidar. Solo eso. Cuidar.
Aunque nunca
sabré cuando fue que la pasión y los motores comenzaron a fallar, mi primer amor
un día no despertó, yo dormía, o eso intentaba, no quería aceptar la realidad,
todo se desplomo, todo ese mundo construido e intangible sobre esta tierra ya
no estaba.
Se me nublo
la vista, el corazón y mi alma nuevamente se ocultó,
me llene de
miedo, me dio frio. Olvide mis abrazos, y quería ser feliz otra vez.
Mi primer
amor escapó de mis brazos.
Cuando llegue
otro. Lo volveré a llamar: “Mi primer Amor”
Escrito por: Alejandro Sequera.
Instagram: instagram.com/estacionvespertine
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